En los más de 30 años que lleva evolucionando el tratamiento de la apnea del sueño, las técnicas de tratamiento mecánico con dispositivos de ventilación han progresado mucho y han aparecido aparatos dentales correctivos (ortesis). Por otro lado, los tratamientos quirúrgicos son más decepcionantes. Se están probando nuevas soluciones.
En cualquier caso, hay que cambiar ciertos hábitos para no empeorar el número de apneas.
Algunos Consejos…
- Evite las comidas pesadas por la noche: el sueño que sigue es entonces de mala calidad, más inestable, favoreciendo los eventos respiratorios.
- Evitar la privación de sueño: es responsable de la fatiga del día siguiente que agrava la somnolencia ya inducida por la apnea del sueño.
- Evite los somníferos, especialmente las benzodiacepinas, o el alcohol: todas estas sustancias actúan directamente sobre la respiración durante el sueño aumentando considerablemente todos los eventos respiratorios.
- Mantener o reducir el peso: el aumento de peso va acompañado de una infiltración de grasa en los tejidos, incluso en la parte posterior de la garganta, lo que contribuye a agravar o incluso a causar el síndrome y dificulta el tratamiento de la apnea del sueño.
- Evite la posición dorsal mientras duerme, ya que los eventos respiratorios ocurren esencialmente en esta posición. Dormir de espaldas es la posición más propicia para la apnea. Hay trucos para evitar esta posición, como una pelota de tenis cosida en la parte trasera de la chaqueta del pijama, o sistemas de sujeción más sofisticados.
- Tratar cualquier obstrucción nasal que aumente la dificultad para pasar el aire.
Pérdida de Peso
Hemos visto que el aumento de peso y la obesidad agravan el síndrome de apnea del sueño. Dicho esto, la relación entre el peso y el síndrome de apnea del sueño no es simple.
El SAS sigue siendo una enfermedad multifactorial y la mayoría de los estudios no establecen una relación lineal entre el índice de apnea y el exceso de peso. Cuando el índice de masa corporal (IMC) está por debajo de 25, el porcentaje de SAS es del 12%, subiendo al 32% cuando el IMC se eleva por encima de 31, y al 42% para los IMC superiores a 40.
La pérdida de peso suele ir acompañada de una disminución significativa del índice de apnea, si no de una recuperación completa. Sobre todos los estudios publicados, en promedio, hay una disminución del 50% en las apneas.
Una pérdida de peso del 10% va acompañada, en promedio, de una disminución del 26% del índice de apnea, y una pérdida de peso del 20% con una disminución del 48%.
Por el contrario, un aumento de peso del 10% tiene un mayor efecto sobre el índice de apnea, que aumenta en un 32%, mientras que un aumento de peso del 20% incrementa el IAH en más del 50% (Orvoën-Frija E., 2004).
Perder peso no siempre es fácil. Requiere una fuerte motivación y un esfuerzo sostenido. La pérdida de peso es más rápida y va acompañada de una mejora del síndrome de apnea y de la calidad del sueño, por lo que se hace indispensable para mejorar la calidad de vida de las personas con apnea, aunque no nos guste ponernos a dieta.
Tratamiento por Ventilación con Presión Positiva
La máquina de Presión Positiva Continua (llamada CPAP) se considera actualmente el tratamiento de la apnea del sueño estándar.
Es una pequeña máquina accionada por una turbina que empuja continuamente el aire ambiental bajo presión hacia las vías respiratorias a través de una máscara facial. La máscara facial se aplica normalmente a la nariz y, otras veces, a la nariz y a la boca. La presión del aire impide que las vías respiratorias se cierren y la respiración es fácil.
Es importante usar la máquina CPAP diariamente y durante el sueño, incluso durante las siestas. Para obtener un beneficio real del tratamiento de la apnea del sueño es necesario un cumplimiento mínimo de 4 horas de uso por día o más. El sistema de seguridad social también tiene en cuenta la duración de la utilización a efectos de reembolso.
En los más de 30 años que lleva evolucionando el tratamiento de la apnea del sueño, las técnicas de tratamiento mecánico con dispositivos de ventilación han hecho grandes progresos. Pero, en cualquier caso, hay que cambiar ciertos hábitos para no agravar el número de apneas.
Ortesis de Avance Mandibular
El tratamiento ortopédico de avance mandibular (MAO) es una alternativa mecánica al tratamiento de la apnea del sueño con CPAP. Es adecuado para los pacientes con síntomas menos graves y que no tienen un sobrepeso significativo, previa consulta con un dentista u ortodoncista y un especialista del sueño.
Actualmente, algunos dispositivos de AOM son reembolsados por la seguridad social, pero el reembolso no cubre la totalidad de la prestación. Por lo tanto, es aconsejable consultar con él o ella para obtener la información necesaria.
Una órtesis es un tipo de aparato dental, generalmente en dos partes, una ajustada a la mandíbula superior y la otra a la mandíbula inferior. Un pequeño sistema de palancas conecta las 2 partes de la órtesis con el objetivo de mover la mandíbula inferior hacia adelante, de manera que la lengua sea empujada hacia adelante, despejando el fondo de la garganta y abriendo las vías respiratorias superiores para un mejor paso del aire.
Lo mejor es el uso de órtesis hechas a medida. Es necesario un control de la eficacia del tratamiento mediante un registro del sueño para adaptar el avance de la mandíbula. Se recomienda encarecidamente un seguimiento regular cada 6 meses con un dentista u ortodoncista capacitado en este tipo de tratamiento.
Este tratamiento puede causar algunas sensaciones desagradables que pueden ser un obstáculo para la continuación del tratamiento como por ejemplo:
- Sensación de tensión en los dientes
- Dolor en las mandíbulas
- Hipersalivación o sequedad de boca
- Encías sangrantes
- Zumbido en los oídos
- Desplazamiento de dientes
Los aparatos ortopédicos se consideran ligeramente menos eficaces que la CPAP. Más bien, representan un tratamiento de segunda línea. Sin embargo, siguen siendo una alternativa terapéutica para aquellos que no pueden tolerar el CPAP.
Cirugía
Dado que el síndrome de la apnea del sueño es secundario a una obstrucción de las vías respiratorias superiores, es lógico pensar que un procedimiento quirúrgico que elimine el obstáculo debería curar definitivamente a la persona apneica. Lamentablemente, el obstáculo no es tan fácil de identificar y los intentos hechos por los cirujanos son diversos.
El primer tratamiento quirúrgico que se propuso para estos pacientes fue una traqueotomía (un agujero en la tráquea que se hace en la base del cuello), una terapia normalmente reservada a las unidades de cuidados intensivos, que sortea el obstáculo y resulta en una curación del 100%. Sin embargo, esta técnica tiene muchos inconvenientes: es antiestética, poco práctica (requiere cuidados diarios) e implica cambios de voz. Por lo tanto, ya no se utiliza en la práctica actual.
Las tres principales regiones anatómicas que pueden obstaculizar el paso del aire son la nariz, el paladar y la base de la lengua. Cada región puede ser reconstruida quirúrgicamente sola o en un procedimiento combinado, si es necesario. Los tejidos blandos pueden ser reposicionados o extirpados, y en algunos casos el maxilar y la mandíbula pueden ser reposicionados para agrandar el espacio posterior de la faringe.
En general, se trata de un procedimiento quirúrgico simple y relativamente ligero que se realiza en la parte posterior de la garganta (paladar blando y/o amígdalas), o en las fosas nasales y/o en la base de la lengua. Sin embargo, este tipo de tratamiento de la apnea del sueño es menos eficaz que la CPAP o la ortesis de avance mandibular (OMA), pero a veces puede ser útil como complemento de los tratamientos de referencia.
Entre los otros tipos de cirugía que se han propuesto, es eficaz una operación en la mandíbula (maxilar inferior) que se secciona para lograr el avance de la mandíbula y abrir así el paso de aire en la parte posterior de la garganta. No obstante, este tipo de intervención es bastante engorrosa y sólo se propone en caso de fracaso o rechazo de otros tratamientos.
Tratamientos Experimentales
Se está evaluando en los humanos un método para estimular el nervio que controla los músculos de la lengua. Los resultados iniciales son prometedores, pero todavía se esperan datos de eficacia y seguridad a largo plazo.
No se ha demostrado la eficacia de ningún medicamento en la apnea obstructiva, pero se siguen realizando investigaciones en este campo.
A grandes rasgos estos son los tratamientos disponibles a día de hoy. El que se utiliza con mayor frecuencia por su alta eficacia, la comodidad de llevarse a cabo en el domicilio del paciente y porque no es invasivo es la CPAP.
Aunque a algunas personas les puede costar un poco adaptarse a ella al principio, una vez se relajan y acompasan su respiración con el ritmo de la máquina notan enseguida los cambios.
Si necesitas informarte sobre el síndrome de apnea del sueño te invito a que eches un vistazo a la interesante serie de artículos que he escrito sobre este tema. Clic aquí para ir al primero de ellos.
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Por último, si te queda alguna duda respecto al tratamiento de la apnea del sueño, puedes dejarme abajo un comentario e intentaré resolverla lo antes posible. Un gran abrazo virtual y recuerda soñar cosas bonitas!!